jueves, 23 de abril de 2020

SOLO UN VIRUS

Por José Raúl Ramírez Valencia
Comenzaba el año 2020, bisiesto por cierto, todo parecería normal. Los supermercados, los centros comerciales, los colegios, las universidades y las iglesias planeaban el año como si el tiempo y la historia se juntasen en un solo abrazo donde no cabe el azar ni el improvisto. Como dirían los más eximios gerentes: todo está bajo control, todo está en nuestras manos, todo está calculado.  Las noticias acerca del virus era solo un rumor proveniente de tierras muy distantes de nosotros. ¿Quién iba a pensar que ese diminuto, invisible, insignificante y lejano virus nos iba a cambiar la vida? El virus nos confinó en los espacios reducidos de nuestra casa, pero a la vez amplio nuestra capacidad de aceptar al otro, sino como quien enriquece, con su presencia, el espacio afectivo y efectivo de la relación.