por José Raúl Ramírez Valencia
En la base de la crisis social está la crisis de
sentido, caracterizada por la crisis de la palabra. Según Aristóteles, el ser
humano es un ser social porque es un ser que está dotado de palabra. Siguiendo
está lógica, se deduce que, si hay crisis social, es porque hay crisis de
palabra; a menor uso de la palabra menor sociedad. Decía el sofista Gorgias: el
ser no existe, y si existiera no podríamos conocerlo y en caso de que fuera
conocido permanecería inexplicable e incomunicable, la palabra no podría expresarlo.
En términos religiosos: Dios no existe, si existiera sería incognoscible, en
caso de ser cognoscible permanecería incomunicable; se termina negando la
esencia de la palabra como comunicación. ¿podemos habitar un mundo sin
palabra?